Seguramente en mas de alguna ocasión se han cruzado con el término AMS 2750. Y junto a este término, es seguro que encontraron las palabras SAE, Nadcap, Pyrometry, termopares, instrumentación, calibración, SAT, TUS, etc...Y es que hoy por hoy el documento AMS2750 es la especificación mayormente aceptada por la industria aeroespacial para definir los requerimientos pirométricos de las operaciones de tratamiento térmico. Para muchas OEMs, esta norma representa el fundamento básico de sus especificaciones de pirometría. Incluso la CQI-9, empleada en la industria automotriz, hacía referencia a esta especificación antes de que AIAG definiera requerimientos de pirometría propios (CQI-9 revisión 3). Pero, ¿Qué tanto conocemos esta especificación y de donde radica su importancia? A continuación les comparto algunos puntos clave para aprender sobre este complejo documento.
Un poco de historia. La Aerospace Material Specification 2750 fue publicada en la primavera de 1980 por la división de estándares aerospaciales de la entonces Sociedad de Ingenieros Automotrices (hoy SAE International). Cabe mencionar que SAE emite alrededor de 6,400 documentos técnicos relacionados con la industria aeroespacial entre estándares (AS), prácticas recomendadas (ARP) y reportes de información (AIR), por lo que no se dejen engañar por el adjetivo “Automotriz”. (Para el sitio SAE International Sección México: http://www.saemexico.org)
¿Cual es la relación del tratamiento térmico con este documento de 43 páginas? Si debemos establecer un antecedente, sabemos que las operaciones de tratamiento térmico son percibidas como cajas negras traicioneras. Al ser operaciones que usualmente solo pueden ser evaluadas a través ensayos destructivos, contamos con dos alternativas para gestionar el proceso: implementar controles cerrados y confiables o, extender la bendición al material que sale del horno y esperar que nunca pase nada. En la industria aeroespacial la segunda alternativa no es una opción (y en teoría en ninguna otra industria). Aquí es donde AMS2750 desempeña un papel importante específicamente para la definición de los controles de temperatura. Se trata de un estándar muy completo que nos permite resolver las incógnitas que los consultores/auditores siempre ponemos sobre la mesa: